LONDRES (Reuters) - El Banco Central Europeo (BCE) tiene una
tarea difícil este año para asegurar que los mercados no reaccionen en
forma exagerada a su normalización monetaria.
La
fortaleza del euro y una duplicación del costo referencial del
financiamiento en solo dos meses podrían estar ajustando las condiciones
financieras de la zona euro más rápido de lo que desearía el BCE,
potencialmente colocando en riesgo a su cronograma de salida del
estímulo.
El banco central ha tenido éxito en orquestar
una recuperación desde los problemas económicos luego de tres años de
considerables compras de activos, conocidas como “flexibilización
cuantitativa”, o QE por sus siglas en inglés.
Pero como
los inversores anticipan una reducción de la política monetaria
extraordinariamente expansiva, un alza demasiado veloz de los retornos
de los bonos podría socavar ese buen trabajo y dificultar el ascenso de
la inflación hacia la meta del BCE, cercana al 2 por ciento.
Algunos factores, como el efecto derrame de los costos de financiamiento de Estados Unidos, están más allá del control del BCE.
Eso
significa que el organismo debe moverse con cuidado cuando indique las
medidas de política a través de la “orientación a futuro”, una
influencia clave sobre el costo de financiamiento de largo plazo, dada
la propensión de los actores del mercado a interpretar las señales de
los banqueros y adelantarse a la decisión real.
El costo
de financiamiento de largo plazo en Alemania se ha duplicado en los
últimos dos meses. En un 0,74 por ciento, está cerca del máximo en dos
años y medio, gracias a unos robustos datos económicos, una mayor
inflación en Estados Unidos y las expectativas de que el estímulo del
BCE terminará más pronto que tarde.
“Las condiciones
financieras se han ajustado, por lo que el mercado debería asumir que el
BCE tardará más en alcanzar su meta de inflación”, dijo Kim Liu,
estratega senior de renta fija de ABN AMRO.
“Pero todo
el mundo prevé una salida temprana de la QE y también han subido las
expectativas de alzas de tasas. Me gustaría saber cómo resolverá esto el
BCE”, añadió.
El esquema de compras de bonos del BCE,
de 2,55 billones de euros, seguirá al menos hasta el 30 de septiembre.
Los economistas encuestados por Reuters prevén que luego irá
disminuyendo para concluir a fin de año, aunque algunos funcionarios han
cuestionado si el programa realmente tiene que seguir más allá de
septiembre.
No hay comentarios:
Publicar un comentario